Pese al magro panorama económico que experimentó el sector económico durante el último semestre de 2019, el IMACEC Diciembre prevé un escenario más alentador.
En este contexto, la industria del bodegaje se plantea como una alternativa en cuanto a flexibilidad y seguridad, elementos que brindan un excelente panorama para hacer frente a un periodo que podría presentarse como complejo.
El segundo semestre de 2019 fue año complejo para la economía. De hecho, de acuerdo al último IPoM publicado por el Banco Central (diciembre 2019), las proyecciones de crecimiento del año recién pasado se estimaron en un 1,0%, luego de un fuerte recorte anunciado producto de la crisis social que impactó al país en el cuarto trimestre del periodo. Pese a ello, el IMACEC arrojó un crecimiento de 1,1% para diciembre interanual, bastante por encima de lo previsto por el mercado.
El panorama, entonces, parece no ser tan desalentador para los diferentes sectores económicos, y el mundo del bodegaje no es una excepción. De acuerdo a un estudio de Colliers International el sector predominante continúa siendo el Poniente, con un 42,1%, seguido por la zona Norponiente, con una participación de 24,4%; el sector Sur, en tanto, registra una penetración del 13,6%, el Norte un 13,5% y, por último, el Sector Centro marca una participación del 6,3%.
“Habiendo consultado a los principales embarcadores y retailers del país, prevemos un incremento de vacancia puntual debido a la disminución de compras programadas a sus proveedores durante los meses de noviembre y diciembre 2019 lo que sin duda afectará los puntos de venta de los principales retailers este semestre. El desafío de los logísticos de todos los rubros es buscar alternativas de almacenaje que permitan ahorrar costos, sentirse seguros y estratégicamente muy bien ubicados”, comenta Marco Ortega, gerente comercial de Bodegas San Francisco, BSF.
BSF ya cuenta con la experiencia, la flexibilidad, seguridad y la calidad de servicios. “Hemos desarrollado espacios de confianza por más de 35 años”. Así lo explica Ortega, quien agrega que “lo positivo es que vemos oportunidades también, porque el mercado busca reducir sus costos tercerizando servicios, entre ellos el arriendo de bodegas. Allí la flexibilidad que brindan los contratos a corto plazo y la posibilidad de contraerse o agrandarse en nuestros Centros de Distribución y Bodegas según la demanda, son una oportunidad para nosotros. Además vemos un interés generalizado por espacios seguros, apartados de los centros urbanos, y nuestra experiencia en ese terreno nos da tranquilidad”.
Con 1.600.000 de m2 disponibles para almacenamiento en Chile, BSF es el principal actor del bodegaje nacional. Desde 1985 a la fecha, ha alcanzado una infraestructura que cuenta con presencia en 14 centros, de los cuales 7 están en Santiago, 4 en regiones (Antofagasta, Chillán, Temuco y Pto. Montt) y 3 en Lima, Perú.