El comercio en tiempos de cuarentena. Esa frase refleja la situación de incertidumbre que vive la industria del Retail, pequeños comerciantes, empresas logísticas, entre otros, luego que se decretaran las medidas de confinamiento social por parte de las autoridades para impedir la propagación del Covid -19.
Ante este escenario, el comercio electrónico se ha transformado en un canal de tremenda ayuda para los consumidores y, por supuesto, también para las empresas, desde el punto de vista comercial. Mientras los canales de venta directa, tiendas y locales permanecen cerrados, el canal online se posiciona con fuerza.
“Sin duda, lo que nos ha tocado vivir como país, en especial, para quienes trabajamos por mantener el necesario y correcto abastecimiento ha sido complejo, en las últimas semanas”, afirma Christian Avendaño, gerente general de Llegó.
Desde la perspectiva de la Última Milla -operación vital para el comercio electrónico- el ejecutivo reconoce que se ha generado “un incremento importante en la demanda, principalmente, por parte del Retail, el cual hemos debido enfrentar, considerando siempre las medidas y resguardos de la salud de nuestro equipo”.
A diferencia del modelo del traslado de personas y comida, el gerente general de Llegó comenta que la última milla del abastecimiento, tanto B2B como B2C, “requiere acompañamiento para evaluar, decidir e implementar las mejores medidas de forma dinámica frente a escenarios que se modifican semana a semana”.
“El desafío no es solo contar con herramientas tecnológicas, sino también, tener un equipo flexible, con experiencia y compromiso que permitan que la logística, desde la dimensión de las personas, tome el lugar que merece”, añade.
De acuerdo con Avendaño la situación operacional, generada por la emergencia sanitaria, es una etapa que lleva al aprendizaje como sector. Diseñar operaciones dentro del nuevo marco, encontrar respuestas rápidas ante los constantes cambios, responder a las fluctuaciones de la demanda y los nuevos tiempos operacionales son algunos de los retos y desafíos que enfrentan los operadores de la última milla.
“Cómo somos capaces de abordar esta complejidad” es -según el ejecutivo de Llegó- la gran interrogante por responder.