Medidas sanitarias más restrictivas, la priorización de productos considerados de mayor necesidad y la menor cantidad de contenedores disponibles ha influido en el volumen de las importaciones y en el aumento del precio para el consumidor final.
Durante los últimos meses no es raro ver que hay menos de algunos productos en las estanterías y que los valores han subido, especialmente si son importados. ¿La causa? El alza del precio de los contenedores y la falta de “stock”.
Y es que a raíz de la pandemia y las medidas tomadas entre los diferentes mercados, el flete marítimo se ha visto resentido ya que los contenedores de gran volumen -40 y 20 pies- están menos disponibles que antes de la crisis sanitaria. De hecho en un periodo normal el valor de un contenedor de 40 HC vale entre U$3000 a U$4000 y en la actualidad bordean los U$11.500.
“La cadena actual de transporte se ve enfrentada a grandes problemas. El Índice Global de Contenedores (World Container Index, WCI) - que lleva un registro de cambios de precios de de los contenedores entre diferentes rutas globales- ha aumentado un 305% desde hace un año-. Esto sin duda tiene un impacto a la hora de importar y comercializar productos”, explica Francisco Navarrete, fundador de SherpaB2B, empresa que ayuda a otras compañías a llevar a cabo la fabricación e importación de su mercadería en Asia.
Los valores del transporte desde China a América del Sur también han enfrentado un alza importante.
“Los fletes se han más que triplicado en su valor frente a un escenario normal desde el inicio de la pandemia y no se prevé aún que haya una baja. De hecho uno de los lugares del mundo que ha sido más impactado por esta alza es nuestro continente”, agrega Francisco Navarrete, debido al menor volumen de compra en relación a otras zonas.
Lo anterior explica el efecto notorio en los precios de productos como ropa, implementos deportivos, médicos, entre otras áreas. Detalla además que las barreras sanitarias implementadas en aduanas y fronteras han impactado en todo esto haciendo más lento y complejo el ingreso de ciertos productos o, asimismo, que se privilegie otros, como los del área salud.
En relación a lo que se prevé para el segundo semestre del 2021 Francisco Navarrate señala que “además de las presiones inflacionarias por excesos de liquidez, el precio de los productos también se va a ver afectado por la escasez de contenedores. Lo que ocurrirá aún es incierto pero es una tendencia que debiera ir modificándose para alcanzar una disminución de precios en la medida que los mercados comiencen a liberar sus fronteras”.