La industria de la distribución ha crecido aceleradamente en los últimos años, dada la alta demanda de transporte y logística existente hoy en día en todo el mundo, para proveer a las diversas comunidades de los productos que requieren a diario. Sin embargo, este sector puede ser una potencial víctima para ciberdelincuentes, quienes aprovechan la baja seguridad informática utilizada por algunas empresas en la gestión, almacenamiento y transporte de bienes, datos y servicios digitales, pueden generar vastas pérdidas económicas y múltiples complicaciones.
Es así como la ciberseguridad adquiere un rol esencial en la protección de la cadena logística de suministros, considerando que ésta se ve expuesta a varias amenazas, como ataques informáticos, a través de la incorporación de diferentes tipos de virus o gusanos informáticos, entre otros programas maliciosos diseñados para dañar al sistema informático. Lo anterior puede derivar en un serio perjuicio para la compañía y a terceras personas, ya sea por la pérdida de datos confidenciales internos, como por ejemplo las hojas de ruta, acuerdos comerciales, nombres de clientes, rutas comerciales, entre otros.
Para dar un ejemplo, el ataque informático a un centro de logística de alimentos podría generar serias dificultades en el acceso de las personas a estos productos, perjudicando a una zona geográfica completa y a toda la cadena de distribución. De igual modo, la intervención de ciberdelincuentes pueda dar pie para el desarrollo de mercado negro, estafas en los precios, etc.
Dicha información, si llega a manos de la competencia, puede hacer que ésta logre una gran ventaja competitiva, al tener antecedentes de clientes y, sobre todo, las hojas de ruta.
En resumen, las empresas de logística cuentan con información muy sensible, tanto por los productos y servicios que transportan, como por los datos confidenciales de sus propios clientes. Y el cierre de las operaciones, generado por un ataque informático, puede tener un impacto inmenso en otros sectores productivos.
Necesidad de ciberinteligencia
Estos antecedentes confirman que la ciberseguridad debe ser integrada como una necesidad básica para la empresa, para lo cual se debe poner esfuerzos en la actualización de los equipos y la instalación de cortafuegos en la red de la empresa, o la integración de un Sistema de Alerta Temprana de Riesgos Cibernéticos para así desarrollar trabajo de ciberinteligencia, es decir, la anticipación en la detección de amenazas informáticas.
La reducción de vulnerabilidades se puede concretar con la instalación de balizas electrónicas o códigos de barras que registren tanto la entrada como la salida de la mercancía desde la zona de almacenamiento. Por otra parte, la capacitación de los trabajadores en seguridad informática es esencial, ya que este plus podría servir para ayudarles a detectar posibles amenazas e implementar las soluciones adecuadas.
Estas medidas, incidirán en la tranquilidad de la empresa y, sobre todo, en una mayor confianza de los clientes en el sector de logística y distribución. Además, una empresa que cuente con ciberseguridad, representa una ventaja significativa frente a una compañía que aún no ha incorporado medidas para evitar la intervención de los ciberdelincuentes y, de este modo, tener segura a toda una cadena de distribución.
Germán Fernández, Director de Operaciones CronUp.com