La solución de radiofrecuencia está teniendo un alza de adopción entre un 10 y 20% en Chile. Ante la necesidad de las industrias de ser más competitivas, la tecnología RFID garantiza precisión y mayor agilidad en sus operaciones.
Las industrias siguen evolucionando a medida que la tecnología también continúa entregando herramientas que facilitan, mejoran y agilizan sus procesos, lo que se traduce a una mayor oportunidad para los colaboradores, ya que esto les permite realizar tareas menos repetitivas y más productivas.
“Hoy son los sectores logísticos, del retail, de la minería y la agroindustria las cuales se pueden observar un incremento en la implementación de tecnología de radiofrecuencia (RFID), ya que les agrega valor con una mayor trazabilidad, precisión y gestión”, explica Leonardo Navarrete, gerente comercial de STG Chile.
Según cifras de STG Chile, en el país hay una fase de crecimiento del uso de RFID de 10 y 20%. Sin embargo, el retail lleva la delantera en su adopción, ya que mejora la gestión de los inventarios y garantiza la precisión en todas las etapas de un producto.
“Esta situación está desplazando un poco al código de barra, una tecnología estándar que ha sido utilizada por muchos años con la especificidad de escaneo individual de los productos, bajo un costo más accesible para organizar inventarios de artículos sin una alta frecuencia de lectura o gran cantidad de datos”, menciona Navarrete.
El alza es concreta. ”Ser competitivos es ser ágiles y precisos en los inventarios. Por esa razón vemos una mayor demanda de RFID frente al código de barra, ya que entrega mayor eficiencia operativa frente a una alta rotación de producto. Hoy la vemos en los espejos inteligentes, equipos de escaneo, cajas de autoservicio, entre otros”, precisa Navarrete.
¿ES EL FIN DEL CÓDIGO DE BARRA?
El experto enfatiza en que aunque el RFID muestre una mejoría en cuanto a la gestión de procesos, al menos en el corto o mediano plazo, ambas soluciones coexistirán, pues cada una son opciones viables dependiendo del requerimiento o necesidad de las compañías.
“RFID es precisión, velocidad y almacenamiento de información. En sectores donde el control de inventarios y la trazabilidad son críticos, como el retail y la logística, el RFID está ganando terreno rápidamente. Pero el código de barras sigue siendo una solución más económica y ampliamente adoptada para productos de bajo valor o aplicaciones donde la inversión en infraestructura no es justificable. Por lo tanto, seguirán siendo una opción viable para las corporaciones. Todo dependerá de la necesidad que tengan”, reitera el ejecutivo.
Relacionado a Chile, son muchos los comercios siguen usando el código de barra, ya que este es parte de un estándar global para la identificación de mercancías, aunque descifrar la cantidad exacta en donde se mantienen o han sido eliminados es difícil de precisar.
APOSTANDO A UNA LOGÍSTICA MÁS ECOLÓGICA
La tecnología RFID además de ser precisa y mejorar los procesos logísticos y operativos de las distintas áreas en donde se implementa, tiene un gran aporte en cuanto a sustentabilidad se refiere. La apuesta está en reducir la huella de carbono y tener un mundo más ecológico, es por ello que a diario se está innovando en soluciones que permitan disminuir la contaminación.
“Además de permitir la reducción del consumo de papel al eliminar la impresión de etiquetas para códigos de barra que luego son desechados por los clientes, la tecnología RFID también ofrece un abanico de soluciones para disminuir la contaminación. En la industria de alimentos, con esta solución las empresas tienen un mayor control de sus inventarios lo que se traduce a una menor pérdida debido a la caducidad de los productos, esto considerando que este sector genera aproximadamente el 57% de las emisiones de efecto invernadero”, recalca Navarrete.
RFID es información en tiempo real de lo que ocurre con los productos “Todas las industrias contaminan y en el sector logístico el transporte es uno de los que tienen un impacto significativo. Es por ello que al implementar RFID hay una optimización de la cadena de suministro que se traduce, por ejemplo, a un control del número de viajes que se realizan en camiones, vehículos o aviones para hacer el traslado de la mercancía”, finaliza el experto.
La tecnología RFID seguirá avanzando y adecuándose a las necesidades de los distintos sectores e industrias las cuales son las impulsoras de tendencias que van a marcar un antes y después en el mundo. Sin embargo, aunque esté ganando terreno, aún no se vaticina el final de los códigos de barra.