La electromovilidad dejó de ser una tendencia y se convirtió en una realidad en la logística. Sus beneficios no sólo apuntan al ámbito operacional o de servicio, sino que también responde a una tendencia mundial en cuanto a la preocupación por el cambio climático. RockTruck ingresó a la electromovilidad con fuerza con flota liviana, apuntando a la flexibilidad de sus soluciones.
En momento en que la última milla se ha transformado en uno de los principales eslabones -en una cadena logística tremendamente exigida- la conciencia sobre sus efectos a nivel medioambiental y en el desarrollo de las ciudades es clave, puesto que es fundamental para fortalecer la relación con el cliente y reforzar el nivel de servicio de la compañía.
En esta línea, el transporte ha reforzado sus proyectos para disminuir sus emisiones de CO2. La optimización de rutas, una adecuada mantención de los vehículos y una conducción correcta son algunas de las acciones que han aportado a esta nueva visión; sin embargo, de la mano del desarrollo e innovación tecnológica se han sumado nuevas soluciones, por ejemplo, la electromovilidad.
En Chile, el tema de la electromovilidad tomó vuelo y varias empresas se volcaron a esta tendencia. Tal es el caso de RockTruck, operador de transporte de carga integral, que ingresó al camino de la electromovilidad para responder a la revolución de la última milla.
RockTruck desde el inició de sus operaciones en 2018 se ha enfocado en revolucionar la industria logística. La innovación es parte de su ADN y ha llevado a la compañía ha iniciar un proceso revolucionario en cuanto a la incorporación y penetración de la electromovilidad en sus operaciones, siempre con el objetivo de “entregar la carga de norte a sur en tiempo y forma”.
MÁS QUE RÁPIDEZ, FLEXIBILIDAD
Felipe Oyarzo, subgerente de operaciones de Última Milla de RockTruck se refirió al buen momento que vive este eslabón de la cadena, en términos operacionales y que ha generado también nuevas exigencias por parte de los clientes y que “nos ha obligado a estar en línea con los cambios, por ejemplo, con la necesidad constante de flexibilidad”.
“Muchos creen que el foco logístico está en la rapidez; sin embargo, todo depende del tipo de producto, pero, en general, la prioridad la tiene la calidad y el poder cumplir con lo que el cliente pide”, afirmó el ejecutivo. Ante esta realidad, RockTruck ha dispuesto distintos tipos de soluciones y flotas para las diferentes entregas.
“Las empresas de última milla deben contar con una diversificación de servicio y flotas para poder cumplir con las demandas de este mercado, desde camiones hasta scooter, ya que el foco del cliente está en el cumplimiento del servicio más que en la velocidad. La clave está en entrega dónde y cuándo el cliente lo requiere”, enfatizó Felipe.
Lo anterior se mezcla con la conciencia medioambiental, ya que “hay una cultura de valorar mucho las acciones de las empresas y cuando uno comienza a buscar alternativas para avanzar en esta línea asoma la electromovilidad que tiene beneficios a la comunidad tremendamente valorado por los clientes y también permite una reducción en los costos operacionales asociados al combustible. Todos ganan con la flota eléctrica”.
Oyarzo reconoció que este cambio cultural hacia la electromovilidad era considerado hace años como un “cambio estratégico costoso y eso generaba cierta incertidumbre”, pero “todo lo que se haga en esta línea es bienvenido y en RockTruck asumimos el compromiso del cambio”.
“investigamos sobre los distintos modelos eléctricos, sus costos, sus beneficios y también sus contras; y nos dimos cuenta de que era una tecnología accesible y que tiene muchos beneficios. Decidimos migrar a estos modelos para no quedar atrás en un mercado que avanza hacia allá y para poder contribuir también al cuidado del planeta”, recalcó el subgerente de última milla.
ESTRATEGIAS QUE MARCAN DIFERENCIAS
En la práctica, RockTruck ha concretado este cambio estratégico con flota ultraliviana, enfocada al rubro de supermercado. “Estamos implementando bicicletas y scooter eléctrico que tiene cualidades únicas que agilizan la operación, tales como, su rápida carga y la posibilidad de usar las ciclovías”, afirma Oyarzo
Si bien, el sector supermercado ha sido el puntapié inicial de este cambio operacional, la compañía ya mira nuevos sectores y nuevas soluciones, tal como lo comentó el ejecutivo: “iniciamos con supermercados, tenemos aproximadamente 15 vehículos y ahora partiremos también con autos eléctricos y llevar flotas eléctricas a regiones. Estamos buscando diversificar los vehículos para poder cumplir con los distintos servicios que demanda el cliente”.
¿Cómo se proyecta el crecimiento de esta tendencia? A este respecto, Felipe afirmó que “el crecimiento de este modelo de negocio ha sido rápido y dado el éxito esperamos en un par de meses ya duplicar la operación con estos equipos. Estamos mostrando a la industria que el modelo resulta y que los niveles de servicios, costos y experiencia de cliente así lo demuestra”.
Sin duda, la última milla es uno de los mercados más competitivos y eso obliga a los distintos actores a buscar formas y caminos de diferenciación y el ingreso al mundo eléctrico es una alternativa. “A muchos le da miedo ingresar al mercado eléctrico, pero nosotros quisimos asumir el riesgo y no nos hemos equivocado, porque ha sido tremendamente exitoso”.
En cuanto al servicio propuesto, Felipe comentó que cuentan con “soluciones de entrega que van desde los 15 minutos a dos días y en todos los modelos tenemos nivel de cumplimiento superior al 98%. Tenemos flexibilidad, adaptando soluciones a las necesidades del cliente. No somos solo autos, no solo camiones ni solo camioneta; somos una empresa integral con soluciones flexibles capaces de responder a los desafíos de la logística moderna”.
De acuerdo con las proyecciones, RockTruck estima un aumento de la facturación de última milla de un 250% este año, en comparación al año anterior.
ARMAMOS TU LOGÍSTICA
Ante el éxito de RockTruck en términos comerciales en sus 4 años de historia, los proyectos de la compañía no paran.
“Estamos abriendo nuevas instalaciones de almacenaje (bodegas); tenemos una en Santiago, abrimos una recientemente en La Serena y proyectamos abrir otra en Concepción lo que nos permitirá acceder a muchas más localidades del norte y sur desde nuestra propia bodega, dando muchas más posibilidades a nuestros clientes de llegar a zonas que antes eran difícil”, detallo Oyarzo.
En cuanto a la flota eléctrica, la empresa espera que su flota crezca en un 500% este año. Oyarzo afirmó además que la compañía está mirando nuevas inversiones para poder iniciar un proceso de expansión internacional.
El desarrollo y expansión de RockTruck no se detiene y es así como hoy se posiciona como una empresa que entrega un servicio integral con soluciones desde la primera a la última milla. La clave de su servicio está en la capacidad para armar la logística de sus clientes, proponiéndoles muchas veces las soluciones.
Así, la consolidación de la empresa va de la mano de un crecimiento sostenido dinámico, tecnológico y cercano; donde la electromovilidad cobra valor en el diseño integral de las soluciones ante los nuevos retos del sector.