La sostenibilidad para una corporación abarca la consideración de su impacto en el medio ambiente y la sociedad, manteniendo al mismo tiempo la viabilidad económica. El medio ambiente, la sociedad y la economía son las tres dimensiones de la sostenibilidad. La sostenibilidad desde la perspectiva logística significa ecologizar y mejorar la eficiencia de los procesos respetando la existencia humana y cooperando con su entorno.
El crecimiento sostenible de la logística puede entenderse también como un método de diseño e implementación de la gestión de la Cadena de Suministro (CS), respetando las razones económicas y minimizando la carga ambiental en la red de distribución. Así, al buscar un compromiso dentro de la CS, se requiere introducir soluciones que permitan un desarrollo sostenible, basado en la armonía con la naturaleza de la industria, que involucre tanto el uso económico como ecológico de los recursos.
La sostenibilidad es hoy en día la tendencia de más rápido crecimiento en la logística a nivel global. La implementación de soluciones logísticas respetuosas con el medio ambiente es necesaria y en un futuro próximo puede incluso ser obligatoria. El factor decisivo de la implementación de la Logística Sostenible (LS) será, indudablemente, un cliente cada vez más consciente del medio ambiente. El elemento más importante de la LS, en el que los cambios serán inmediatamente visibles, es el transporte y la reducción asociada de emisiones de CO2 y Gases Efecto Invernadero (GEI).
La reducción de la huella de emisiones globales es uno de los principales retos de la LS. Los retos que impone a futuro la LS afectan principalmente a los miembros de las cadenas de suministro; fabricantes, sus proveedores, distribuidores, proveedores de servicios logísticos, operadores logísticos, transportistas, almacenistas, empresas comerciales.
También afecta a los inversores, las partes interesadas o stakeholders, los clientes, los consumidores y los responsables políticos. La LS se puede definir como la integración estratégica y transparente y el logro de los objetivos sociales, ambientales y económicos de una organización en la coordinación sistémica de los procesos comerciales interorganizacionales clave para mejorar el desempeño económico a largo plazo de la empresa individual y su cadena de suministro.
La LS abarca desde soluciones e ideas operativas hasta estratégicas, tales como: desempeño ambiental y producción verde (reducción de la cantidad de desechos y contaminación); ecoeficiencia; operaciones verdes y gestión logística; gestión verde de la cadena de suministro y logística inversa, en el contexto de redes regionales o locales y rutas de flujos de materiales; ecodiseño y desarrollo sostenible de nuevos productos.
En efecto, si los proveedores de las empresas adoptan una perspectiva sostenible, entonces, es posible generar fuertes relaciones de interdependencia dentro de una cadena de suministro, lo que mejoraría el medio ambiente y la economía global. La LS puede ayudar a las empresas y /u organizaciones a aumentar su productividad, mejorar la reputación corporativa, desarrollar nuevos mercados y lograr ventajas competitivas.
En consecuencia, la gestión sostenible de la CS Sostenible (CSS) se define como el grado en que un fabricante colabora estratégicamente con sus socios de la CS y gestiona de manera colaborativa los procesos intra e interorganizacionales para la sostenibilidad logística de esta.
RETOS DE UNA LOGÍSTICA SOSTENIBLE
Los retos de la Logística Sostenible (LS) variarán según el tipo de organización. Una empresa de fabricación con una función de logística principalmente subcontratada participará en la agenda de sostenibilidad de una manera diferente a un fabricante con operaciones logísticas internas, un minorista o un prestador de servicios logísticos.
Como las actividades centrales de valor agregado variarán entre estas organizaciones, también variará la magnitud y la naturaleza de sus impactos ambientales, sociales y económicos y, por tanto, sus agendas. El tamaño de una organización también determinará el alcance y el nivel de sofisticación de sus iniciativas de sostenibilidad logística. Esto puede deberse a los recursos disponibles, el conocimiento y las habilidades de la fuerza laboral, las presiones legislativas y reglamentarias y el apoyo externo ofrecido a la empresa u organización en cuestión.
La experiencia o madurez de la empresa u organización también jugará un papel importante en el desarrollo e implementación de programas de LS. Las organizaciones que recién están comenzando en este camino podrían enfocarse más en acciones orientadas a los resultados, como un cambio de tecnología para lograr una reducción instantánea de las emisiones de GEI. Es más probable que las organizaciones más maduras se involucren en un alcance más amplio de iniciativas, a menudo con un enfoque más estratégico. Por tanto, los retos que incluye la LS, entre otros, a saber:
Innovación: La innovación es un factor clave en la LS, ya que se entiende como la implementación de un servicio, proceso u organización nuevo o significativamente mejorado para la empresa en una actividad logística, que contribuye a un desarrollo más sostenible ambiental y/o socialmente. Las innovaciones dentro de la sustentabilidad pueden afectar significativamente el desempeño de la empresa debido a su impacto positivo en la participación de mercado y la reputación y, por tanto, pueden generar ingresos; la innovación en la LS se centra en los proveedores de servicios logísticos. Las empresas necesitan innovar constantemente para reducir el daño al medio ambiente y a las comunidades en las que operan. Las innovaciones aumentan el desempeño económico de la empresa, pero no necesariamente conducir al desempeño ambiental o social; las innovaciones sostenibles pueden fortalecer las relaciones con los clientes en asociaciones más duraderas.
Diseño de Productos: una de las formas más sencillas de reducir el impacto ambiental de un producto es evaluar cuidadosamente las opciones de materiales. La idea es sustituir los materiales de alto impacto ambiental por materiales más respetuosos con el medio ambiente, al mismo tiempo que se reduce la cantidad de material utilizado (y desperdiciado) mediante el rediseño de las estructuras de los componentes: la intensidad material de los bienes y servicios (la cantidad de materiales utilizados e incorporados a los productos y servicios). Este principio apunta en última instancia a avanzar en los procesos de desmaterialización; reducir la intensidad energética de los bienes y servicios mediante la incorporación de materiales que requieran menos energía en su producción, mejorando su reciclabilidad, aumentando la capacidad de capturar y separar materiales específicos del flujo de residuos; maximizando el uso sostenible de los recursos renovables en los productos.
Servitización: describe la estrategia de las empresas manufactureras para ofrecer paquetes de mercado más completos o paquetes de combinaciones de bienes, servicios, soporte, autoservicio y conocimiento centrados en el cliente. La servitización es particularmente valiosa para tipos específicos de productos, a saber, productos con ciclos de vida prolongados (específicamente, fases de uso prolongadas), innovación mínima (que experimentan pocos cambios con el tiempo) y alto valor (costosos de reemplazar). Como estrategia, ofrece muchas posibilidades para mejorar la LS; los servicios giran en torno a un producto; los servicios contienen altos niveles de personalización para satisfacer una particular necesidad particular (individual) del cliente; acerca al fabricante a las operaciones del cliente y, por tanto, mejora la sostenibilidad ambiental lo que permite a los fabricantes reducir el costo de uso de sus productos (pilar de sustentabilidad económica).
Almacenes Sostenibles: las iniciativas de la LS también deben incorporarse en el diseño y operación del almacén, centro de distribución, terminal o centro logístico. La primera decisión clave en el diseño para la sustentabilidad es el número, la ubicación y la capacidad de las instalaciones de distribución, ya que esto determinará en gran medida la intensidad del transporte de la red logística general. Las decisiones que se tomen en esta etapa tendrán consecuencias para las distancias de transporte, el potencial para utilizar equipos más eficientes, el acceso a las terminales y las oportunidades para utilizar modos de transporte menos intensivos en energía, así como la capacidad de consolidar los flujos de transporte para una mejor utilización de los recursos de transporte. Los aspectos ambientales de la operación del almacén se enfocan en la reducción del uso de energía en iluminación, control de temperatura y uso de equipos de manejo, prevención de fugas de refrigerantes y emisiones de GEI asociadas, así como almacenamiento, etiquetado y empaques adecuados de materiales peligrosos. La gestión adecuada del inventario también es importante para evitar pérdidas económicas y medioambientales asociadas con la obsolescencia de las existencias, al igual que las políticas para maximizar el nivel de reutilización y reciclaje del material de embalaje y la eliminación segura de los residuos.
Embalaje Sostenible: es el proceso de diseño, implementación y control de los sistemas integrados de empaque, producto en la CSS con el objeto de para preparar bienes para su manipulación, transporte, distribución, almacenamiento, venta al por menor, consumo, recuperación, reutilización o eliminación seguros, eficientes y efectivos, y la información relacionada, con miras a maximizar el valor social y para el consumidor, las ventas y las ganancias de una perspectiva sostenible, y sobre una base de adaptación continua. El embalaje sostenible requiere de innovación en el diseño de envases. Estos incluyen el rediseño del producto para cambiar el peso, la forma o el tamaño; redimensionamiento de envases; cambios en la paletización, con o sin cambio de tamaño del paquete; cambios en el número de unidades por paquete; estandarización de formatos, reduciendo el número de referencias de envases; cambios en el tipo o la calidad del material utilizado; cambios en el diseño gráfico; cambio en el proceso de empaque; y la creación de envases retornables.
Ecologización: la LS y las CSS requieren colaboración y de relaciones mutuamente beneficiosas entre clientes, proveedores, competidores y otras partes interesadas en un entorno cada vez más interconectado y global, lo que puede tener beneficios positivos para la sostenibilidad. Por ejemplo, dos competidores podrían compartir las instalaciones de transporte y almacenamiento en un esfuerzo por evitar la circulación de camiones vacíos y también brindar oportunidades de logística inversa o de retorno. La “ecologización” de las actividades logísticas y las CS significa garantizar que estas actividades sean respetuosas con el medio ambiente y no derrochen, y se centren especialmente en la reducción de las emisiones de CO2 y GEI en toda la CS.
Descarbonización del Transporte: la actividad logística más relevante y con mayor impacto en la sostenibilidad es sin duda el transporte. De hecho, el sector del transporte es uno de los que más energía consume y más emisiones de CO2 y GEI genera en toda la CS, esto debe verse a la luz de que el transporte de mercancías por carretera tiene, con mucho, la mayor parte de las toneladas-kilómetro de todos los modos de transporte terrestre. Su descarbonización requiere de tres estrategias principales: evitar o reducir el transporte mejorando la eficiencia general del sistema mediante la reducción en el número de envíos o la duración del viaje; mejorar la eficiencia de los envíos individuales mediante la promoción de un cambio modal desde el modo de transporte que consume más energía (carretero) hacia modos de transporte con bajas emisiones de carbono (ferroviario-fluvial/lacustre); mejorar la eficiencia energética de los modos de transporte y la tecnología vehicular relacionada, mediante el uso de combustibles bajos en carbono y aumentando la eficiencia del combustible.
Intermodalismo: el transporte intermodal de mercancías es un tipo específico de transporte multimodal, en el que se utilizan dos o más modos de transporte para transportar la misma unidad de carga (contenedor marítimo) de manera integrada, sin carga ni descarga, en una cadena de transporte “puerta a Puerta". Esto significa que la carga permanece en la misma unidad de carga durante toda la cadena de transporte, a diferencia del transporte multimodal en el que la carga se vuelve a cargar durante el proceso de transporte. En el transporte intermodal se utilizan modos de transporte respetuosos con el medio ambiente (modos más bajos en carbono: ferroviariofluvial/lacustre-marítimo de corta distancia) para la mayor parte del viaje; los procesos previos y posteriores realizados por carretera deben ser lo más breves posible. Así, se añade el aspecto de la sostenibilidad al concepto de transporte intermodal de mercancías. En comparación con el modo de transporte intermodal, el multimodal es más complejo porque involucra un mayor número de actores y hay más interfaces con otras organizaciones (compañías ferroviarias) en las que no se puede influir y en efecto, se fragmenta todo tipo de flujo logístico sostenible.
Conducción Ecológica. esto incluye la formación de conductores para que adopten un estilo de conducción más eficiente en el consumo de combustible; aumentar la conciencia vial del conductor y cómo su estilo de conducción puede afectar la eficiencia y seguridad del vehículo sin aumentar el tiempo de viaje. La conducción ecológica reduce el consumo de combustible, las emisiones de CO2 y GEI, lo que se traduce en menores costos de mantenimiento, menos daños en las mercancías transportadas y una mayor seguridad vial. Esta es una medida con un sólido argumento comercial y puede aumentar la eficiencia del combustible hasta en un 15 %. Los estudios muestran que, en promedio, la conducción ecológica conduce a una reducción promedio del 10 % en el consumo de combustible.
Velocidades más Lentas: la disminución de la velocidad de los vehículos no necesariamente afecta los tiempos de entrega (se puede ahorrar tiempo en actividades de la cadena logística que no son de transporte); genera la disminución del 10 % en los costos operativos y la reducción de emisiones de CO2 y GEI debido a un menor consumo de combustible. De hecho, la navegación lenta es una característica operativa común de la industria naviera actual con buques de carga moviéndose a velocidades significativamente menores que su velocidad máxima. Como regla general, pueden ser del 19 % por viaje para una reducción del 10 % en la velocidad, pero pueden llegar hasta el 60 % en el envío (descarbonización del envío). Para el transporte de mercancías por carretera, una reducción de la velocidad de un camión pesado en una carretera de 90 a 70 km/h puede generar un ahorro de combustible del 12 %.
Reapuntalamiento: esto implica acercar la fabricación a los centros de consumo. Es el proceso inverso de la deslocalización, donde la fabricación se traslada a otra región donde los costos de producción son más bajos. Se enfoca más en la disminución de distancias que en los productos en sí. Tiene el potencial de recortar los kilómetros necesarios en las largas y complejas CS actuales (reducción de emisiones de CO2 y GEI), pero esto no significa necesariamente una relocalización de la producción a gran escala. La producción puede simplemente trasladarse de una región o país extraterritorial a otro.
Flota Verde: los vehículos de transporte se han convertido en uno de los principales consumidores de combustibles fósiles y fuente de emisiones contaminantes (CO2 y GEI). En respuesta a las presiones regulatorias y competitivas, la evaluación y selección de vehículos de transporte más sostenibles ha ganado una atención cada vez mayor por parte de organizaciones en diversas industrias. Muchos proveedores de transporte y logística han comenzado a adoptar vehículos de combustible alternativo, con vehículos totalmente eléctricos con una autonomía de más de 80 kilómetros. La mayoría de los vehículos de transporte sostenibles dependen de fuentes de combustible alternativas como la electricidad, la energía solar, la eólica, los biocombustibles y el gas natural comprimido. Dependiendo del tipo de combustibles alternativos, cada tipo de vehículo de transporte tiene sus fortalezas y debilidades operativas, ambientales y económicas. Por tanto, las organizaciones deben evaluar los requisitos de la flota de transporte teniendo en cuenta sus objetivos económicos internos y sus estrategias de sostenibilidad. La adopción de vehículos de combustible alternativo requiere una consideración holística de las dimensiones económicas, ambientales y sociales al tomar decisiones de compra importantes.
Huella de Carbono: la Huella de Carbono (HC) puede referirse a una organización, una cadena de valor o un producto; representa las emisiones de todas las actividades de una organización (incluido el uso de energía en los edificios, los procesos industriales y los vehículos de la empresa). La HC de la cadena de valor incluye también las emisiones fuera de las propias operaciones de la organización (emisiones tanto de los proveedores como de los consumidores, incluido el uso del producto y las emisiones al final de su vida útil). La HC del producto incluye las emisiones durante todo el ciclo de vida de una determinada unidad de producto o servicio, desde la extracción de materias primas y la fabricación hasta su uso y reutilización final, reciclaje o eliminación. En consecuencia, las emisiones de GEI a menudo se denominan emisiones de carbono (CO2). En consecuencia, algunas empresas solicitan a sus proveedores y subcontratistas datos sobre sus emisiones sobre los vehículos utilizados, la distancia recorrida, la eficiencia del combustible, etc., no solo para calcular las emisiones totales de CO2, sino también para evaluar el desempeño ambiental de los transportistas.
Certificado Digital Huella de Carbono (CDHC): es un parámetro basado en tecnología disruptiva Blockchain para estimar, monitorear, reportar y verificar las emisiones de GEI causadas por el transporte de mercancías; actúa como un método de registro documental de identificación, permite almacenar y mantener información de cada vehículo de transporte de mercancías. Siendo una credencial para un ente público o privado que requiere de identificar y compartir información de forma segura a través de la Internet. El uso conjunto de la tecnología disruptiva Blockchain y el CDHC tiene como objetivo garantizar la transparencia de las transacciones a un registro inalterable distribuido entre muchos usuarios de fácil acceso en un entorno colaborativo y que permite que todos los agentes accedan rápidamente a la información. Esto significa, mayor eficiencia, un enfoque más ágil a nivel de gestión, mayor reactividad y menor riesgo de error en el tratamiento de la información.
El CDHC se establece en la fase temprana de planificación del transporte de mercancías, antes de su inicio, mediante la recopilación de la información necesaria; el CDHC sigue siendo válido durante y después del proceso de transporte. En cualquier momento, los interesados, autorizados, lo pueden recuperar con toda la información obtenida en el flujo logístico de transporte de mercancías. Reúne de manera detallada información previa y posterior del proceso de certificación y autorización del interesado, combina información adicional detallada para el proceso de transporte; el CDHC se actualiza con la última información (en el momento y en tiempo real), lo que permite mejora los aspectos de control de calidad y gestión del proceso logístico sostenible. Esta función de seguimiento y localización permite respuestas rápidas en caso de emergencias (mediante envío de información); el CDHC es la verificación y demostración de responsabilidad y compromiso medioambiental por parte de la empresa de transporte de mercancías. Es la forma de hacer que los esfuerzos de sostenibilidad de las empresas de transporte sean transparentes y visibles; es la fuente de ideas para implementar nuevas medidas, para la toma decisiones y para continuar dando forma al futuro del sector del transporte de mercancías de manera sostenible.
Cadenas de Suministro Colaborativas: lograr un desempeño sostenible requiere colaboración dentro de las CS. Como mínimo, la organización focal necesita acceso a la información. Una cadena de Suministro Colaborativa (CSC) como parte de la gestión sostenible de la CS requiere de la integración voluntaria de consideraciones económicas, ambientales y sociales con sistemas comerciales interorganizacionales clave diseñados para gestionar de manera eficiente y efectiva los flujos de materiales, información y capital asociados con la adquisición, producción y distribución de productos o servicios para cumplir con los requisitos de las partes interesadas y mejorar la rentabilidad, competitividad y resiliencia de la organización a corto y largo plazo. Una CSC describe cómo una empresa involucra a las partes interesadas en su CS con el fin de obtener, procesar y transferir información relevante relacionada con el cambio climático global.
Ecoeficiencia: es la reducción del consumo intensivo de recursos y la minimización de los impactos ambientales de la producción y los productos o servicios; se logra mediante la entrega de bienes y servicios a precios competitivos que satisfacen las necesidades del consumidor y brindan calidad de vida, mientras se reducen progresivamente los impactos ecológicos y la intensidad de los recursos a lo largo del ciclo de vida a un nivel al menos en línea con la capacidad de carga estimada de la Tierra; propone la transformación de los productos y sus procesos de producción de manera que formen una relación de apoyo con los sistemas ecológicos y el crecimiento económico futuro.
Logística Inversa 4.0: la Logística Inversa (LI) es un tipo de CS cuyo objetivo es optimizar los flujos de regreso de bienes desde el punto de consumo hasta el punto de origen para planificar, implementar y controlar de manera eficiente y efectiva la adecuada eliminación de materiales, productos finales e inventarios, o recuperación de su valor a través de la reventa, reacondicionamiento, reparación, refabricación o reciclaje, mediante la introducción de procesos de recuperación, remarketing, reutilización, refabricación y reciclaje, convirtiéndose así en una opción prometedora para concebir el desarrollo sostenible. En efecto, la LI tradicional no puede hacer frente a los requisitos de la LS y las CSS y requiere la implementación de tecnologías disruptivas de la Industria 4.0 para cumplir con sus objetivos de sostenibilidad (Logística Inversa 4.0); la Industria 4.0 permite a las empresas y/u organizaciones gestionar los flujos de retorno que son menos predecibles y más variables que los directos; respaldan la sostenibilidad económica, social y ambiental de la CSS al fomentar la digitalización, automatización e integración y, cohesión de las redes informáticas con los flujos logísticos reales a través de la aplicación de tecnologías como la Internet de las cosas, Blockchain, Mercados Electrónicos Móviles, Computación en la Nube, Big Data, Minería de Datos, Inteligencia Artificial, Vehículos Autónomos, Vehículos Auto-Guiados, Realidad Aumentada (RA), formando así un Sistema Ciberfísico como apoyo a la LI 4.0.
Por: Ing. ALEXANDER ESLAVA SARMIENTO, Consultor Portuario – Especialista en Logística Internacional