Durante el último año y medio, el rubro logístico ha avanzado a pasos agigantados en materia de digitalización y automatización de sus procesos, en respuesta a los desafíos en materia de competitividad, productividad y seguridad que impuso la Pandemia del Covid-19, que al poco andar se transformó en la crisis socioeconómica más importante del novel siglo 21 y en verdadero punto de inflexión para los diversos actores del comercio y de la cadena de suministro mundial.
Bajo este enfoque, una de las tendencias que se ha acelerado en el último periodo es la robotización de procesos intralogísticos, es decir, aquellos desarrollados al interior de los Centros de Distribución, entre los cuales se cuentan: el almacenamiento y extracción de mercancías hacia y desde las estanterías, la carga, descarga y desplazamiento de las mercaderías en el almacén, las operaciones de picking y preparación de pedidos, pasando por procesos de paletizado y embalaje, entre muchos otros.
Ya sea que se trate de grandes proyectos de automatización, utilizando robots de nivel industrial o de proyectos “híbridos”, basados en la implementación de los denominados robots colaborativos o Cobots, la robótica aplicada a la operativa warehousing se impondrá en el mediano y largo plazo; y entre las razones que se esgrimen para este ineludible avance se cuentan: la búsqueda de mayor competitividad, precisión y rapidez a nivel operativo, los cambios en el consumo; impulsados por el exponencial crecimiento del comercio electrónico y un factor exógeno derivado de la crisis sanitaria y que se visualiza como tendencia: la reducción de los equipos de trabajo presenciales en pos de la continuidad operativa de las empresas y de la seguridad sanitaria del Recurso Humano.
A partir de lo expuesto, resulta relevante conocer el alcance y ventajas de este tipo de implementaciones. Con ello en mente, Revista Logistec invitó a ejecutivos de tres empresas líderes en la implementación de soluciones de robótica para la industria logística; nos referimos a: Julián Russi, local marketing South América de Kardex; José Miguel Ferrand, director de Caltronics y Omar Aquino, director comercial de MIR, (Mobile Industrial Robots), empresa de capitales daneses, representada en nuestro país por STG Chile.
LA ROBÓTICA EN EL CD, TENDENCIA INELUDIBLE
¿Por qué la robotización de procesos intralogísticos se ha consolidado como la nueva tendencia en ascenso en el rubro logístico? Las razones, según los expertos, son variadas y responden no sólo a factores operativos y estratégicos, sino también a variables exógenas que se han derivado de las crisis sanitarias que sigue azotando al planeta.
A este respecto, José Miguel Ferrand destacó que “hace sólo unos años, cuando se hablaba de implementar soluciones o poner en marcha proyectos de automatización y robótica, existía la creencia de que se trataba de inversiones muy altas, con relación a su rentabilidad. A eso se sumaba el mito de que este tipo de proyectos implicaban una alta resistencia a nivel “cultural” al interior de las organizaciones.
No obstante, en los últimos dos años y, exponencialmente debido a la pandemia, hemos sido testigos del incipiente interés que este tipo de tecnologías y su implementación ha tenido y van ganando terreno, principalmente porque en la actualidad estas soluciones son muy accesibles. Si lo llevamos a números, prácticamente implementar un CD robotizado con autoportantes, por ejemplo, genera una disminución del espacio (M2) en una relación de 1 a 6 (hasta 6 pallet/m2) y tradicionalmente, la relación es de 1 a 1. Solo a partir de este indicador, tienes una reducción de costos visible, con lo cual podemos decir que implementar un CD robotizado, podría costar prácticamente lo mismo que implementar un CD tradicional”.
En relación con la resistencia cultural y la rentabilidad de estas soluciones, Julian Russi, manifestó que “en la región latinoamericana existía una reticencia, una dificultad de aceptar el cambio tecnológico, pero también vemos que los líderes jóvenes están impulsando estas implementaciones, ellos ven en la robótica un aliado a su operación intralogística. Se trata de personas que no tienen el prejuicio de que estas tecnologías reemplazarán al Recurso Humano, sino que, por el contrario, les permitirá a la organización y a sus colaboradores crecer de una forma más rápida, adaptándose a los requerimientos actuales del mercado y a nivel profesional también”.
Según indicó Russi, desde el punto de vista del Retorno de Inversión, “los estudios que hemos realizados nos indican que el retorno de la inversión de un proyecto que involucra automatización y robótica es prácticamente el mismo que el de un sistema tradicional. Si bien la inversión inicial de las soluciones de robotización es más fuerte, eventualmente el crecimiento será mayor”. Y es que según explicó Russi, los errores humanos son costosos para el CD, así también, el envío de un pedido erróneo puede perjudicar las relaciones con los clientes y aumentar las tasas de devolución y las solicitudes de reembolso. Todo esto puede, en última instancia, perjudicar los resultados.
En lo referido, específicamente a la implementación de robots colaborativos, el ejecutivo de Kardex indicó que este tipo de soluciones pueden tomar decisiones rápidas y ayudar a los asociados a gestionar de forma más eficiente múltiples tareas durante un solo viaje a la planta del almacén. Y dado que los “cobots” guían a sus asociados a través de las tareas, también minimizan la probabilidad de errores humanos.
Si a lo anterior se suman las ventajas “intrínsecas” de este tipo de soluciones, entre las que se cuentan Flexibilidad, escalabilidad y seguridad, los entrevistados aseguran que la decisión de implementación se inclina positivamente entre los líderes logísticos de las organizaciones. Al respecto, Omar Aquino, Representante de MIR, marca danesa comercializada en nuestro país por STG Chile, manifestó que, “si bien cada proyecto tiene sus características, lo cierto es que, las soluciones de robótica para la industria logística son bastante flexibles, escalables en cuento a la forma en que se pueden utilizar y adaptables a los distintos tipos de procesos que puedan existir al interior del almacén, así como a los cambios que se puedan dar en las áreas de trabajo o procesos productivos. No existe una estandarización, cada proceso tiene sus particularidades y la ventaja de este tipo de soluciones es que adaptan a estas particularidades en un marco de limitaciones por la misma tecnología”.
Así, la flexibilidad y la adaptabilidad de estas soluciones son factores clave, lo que sumado a la escalabilidad entrega un abanico de opciones de implementación para diferentes empresas, de los diversos rubros y envergaduras. “un proyecto de robotización en la industria logística puede iniciar por algo sencillo, e ir subiendo en nivel de complejidad para interactuar con otro tipo de automatizaciones, tales como sorters, cintas transportadoras, elevadores, almacenes inteligentes de pallets, integración con robots de paletizado o robótica colaborativa e industrial, dependiendo del tipo y volumen de los productos que se moverán y la velocidad del proceso requerida por los clientes”, indicó el ejecutivo de MIR.
En este punto, el director de Caltronics, agregó que en la actualidad las soluciones de automatización y robótica pueden diseñarse en completa sintonía con las necesidades específicas de cada cliente y así tomar decisiones operativas clave, incluyendo la construcción de nuevos centros de distribución o la adaptación de centros existentes para operaciones intensivas y de gran volumen, por ejemplo, para el sector industrial, minorista y de consumo masivo o retail”.
Siempre en este punto, los expertos coinciden en que cuando se tiene un componente tecnológico tan fuerte como la robótica, puedes garantizar muchas cosas que, a través de una operación basada en el factor humano, no puedes garantizar. “Aspectos como la eficiencia, precisión, seguridad, son intrínsecos a las soluciones de automatización y robótica. Cuando manejas un concepto operativo tradicional los errores son constantes, pero cuando tienes trazabilidad en la línea de distribución de los productos o cuando sabemos cuántos SKU’s podemos almacenar en un margen de tiempo y espacio determinado, puedes entregar certezas, ser fiable con el cliente”, sostuvo Russi.
RR.HH. Y EL EFECTO PANDEMIA
Teniendo en cuenta lo acontecido a partir de la crisis sanitaria mundial y sus efectos en las cadenas de suministro y en la operativa logística a nivel nacional y global, los expertos manifestaron que a partir del advenimiento de la pandemia, muchas empresas volcaron sus esfuerzos hacia la implementación tecnológica, sobre todo considerando el cambio en los hábitos de consumo de las personas a raíz del explosivo crecimiento del e-Commerce y de la problemática operativa derivada de la reducción de los equipos de trabajo presenciales para evitar contagios al interior de los recintos logísticos.
En este plano, José Miguel Ferrand fue enfático en manifestar que “a raíz del Covid-19 todo cambió, vimos como muchas empresas debieron seguir operando sus Centro de Distribución con equipos de trabajo muy reducidos, en sistemas de turnos aleatorios para evitar contagios que pudieran poner en riesgo su continuidad operativa. Durante todo 2020 y lo que va de 2021 hemos conocido experiencias de niveles de servicios del 60%, lo que para el rubro logístico es un pésimo indicador. Si a eso le sumamos el hecho de que actualmente en nuestro país estamos viviendo una importante escasez en la mano de obra operativa, no es de extrañar que en el futuro más próximo y en la medida que las empresas e industrias compitan por reclutar operarios, los trabajos que son muy repetitivos o físicamente exigentes serán cada vez más difíciles de cubrir y es ahí donde la robótica se alza como una oportunidad”.
En concordancia a lo expresado por el ejecutivo de Caltronix, Julián Russi, sostiene que, para explicar el ascenso de la robotización como una de las principales tendencias para el sector logístico, es importante tener en cuenta la Pandemia del Covid-19, toda vez que “actualmente muchas empresas se ven obligadas a mantener ciertos niveles de eficiencia, rapidez en la entrega de los productos y niveles de productividad sin perder de vista la seguridad sanitaria. A partir de eso, las empresas requieren soluciones que les permitan garantizar temas tan delicados como el distanciamiento social, la ergonomía y seguridad que no pasó desapercibida para aquellos que no tenían igual nivel de integración tecnológica; de ahí que hoy tengamos muchos proyectos en carpeta en materia de robotización no sólo en Chile, sino también en la región latinoamericana.
Siempre en torno a la seguridad, el ejecutivo de MIR, agregó que “en la actualidad, este tipo de proyectos son en su mayoría híbridos, es decir, existe una parte del proceso realizado por un operador, por un ser humano que interactúa con el robot, el que a su vez integra altos niveles de seguridad, reduciéndose con ello el riesgo de accidentes, por ejemplo. Ahora bien, desde el punto de vista de la productividad y eficiencia, desde STG indican que este tipo de soluciones, impulsan los niveles de productividad, considerando que los almacenes son grandes, lo que significa que los empleados recorren largas distancias para encontrar las referencias y transportar los pedidos a las áreas de embalaje y envío. Así, se calcula que un almacén medio desperdicia 6,9 semanas al año en caminatas y otros movimientos innecesarios, lo que supone unos 265 millones de horas de trabajo con un coste de 4.300 millones de dólares. El exceso de movimientos no sólo es costoso, sino que también puede ralentizar la productividad de los empleados del almacén durante sus turnos.