En la actual dinámica de consumo omnicanal, en la cual las personas -hiperconectadas- exigen una experiencia de compra satisfactoria, integrada y multiplataforma, el reto para los comercios y sus partners logísticos es cubrir dicha necesidad de forma eficiente y eficaz; una tarea en la cual la implementación de tecnologías se ha convertido en la regla de oro.
En esta línea, específicamente en el contexto intralogístico, las soluciones de gestión de almacenes, más conocidos como WMS (Warehouse Managment System), se han instalado a nivel global como una herramienta obligada para las empresas que desean responder en tiempo y forma ante sus consumidores, toda vez que estas soluciones ofrecen la visibilidad de todo su inventario y gestiona las operaciones de la cadena de suministro, desde el centro de distribución hasta el punto de venta. Al mismo tiempo, estos softwares permiten maximizar la utilización de la mano de obra, el espacio en bodega y las inversiones en equipos, coordinando y optimizando el uso de los recursos y los flujos de materiales, entre otros beneficios.
Ahora bien, considerando lo expuesto en el último reporte del Cuadrante Mágico de Gartner sobre Sistemas para la Gestión del Almacén 2023; “a pesar de ser un mercado maduro, recientes factores macros y disrupciones han alentado mayor innovación” en materia de sistemas de gestión de almacenes (WMS). En esta lógica, el reporte sostiene que “aunque las condiciones económicas y empresariales presentan retos en algunas regiones y para algunos proveedores, el pronóstico del mercado en general superará los USD 3,35 mil millones para el 2024 con una tasa de crecimiento anual del 9.99% (CAGR) durante 5 años”, lo que representa una positiva perspectiva, tanto para los proveedores de este tipo de soluciones, como para las empresas que las implementarán.
En tanto, y considerando que los WMS se instalan como una herramienta estratégica, cabe preguntarse cómo ha evolucionado el uso de este tipo de softwares a nivel regional y nacional. En este contexto, según lo expuesto por Sebastián Flores, subgerente de División y Servicios de STG Chile, “hoy en día, tanto en Chile como en Latinoamérica, el WMS juega un rol clave, principalmente, porque es una base para poder dividirse entre los distintos canales de distribución y a los distintos tipos de segmentos”.
Según explica Flores, “el mercado latinoamericano, hoy en día, está muy desabastecido de este tipo de soluciones ya que es muy amplio y reticente a modernizarse”. No obstante, en Chile – indica el ejecutivo de STG Chile- “tenemos una alta tasa de operaciones con WMS, tanto en negocios emergentes como negocios establecidos”. Al respecto, añadió que “los comercios emergentes han tenido un incremento desde 2019 hacia el 2022 de al menos un 20% (en la implementación de estas soluciones). Mientras que los mercados tradicionales son más reservados en términos de estadísticas, ya que utilizan este tipo de soluciones desde hace varios años a nivel de multinacionales, por ende, ellos van expandiendo su uso hacia los distintos segmentos de sus empresas como engranaje principal con el fin de integrar nuevas tecnologías”.
Con todo, lo cierto es que aún queda mucho espacio de crecimiento en el país en torno a la implementación de este tipo de tecnologías, principalmente, debido a los cambios que ha experimentado la dinámica del mercado, el aumento de la complejidad de la cadena de suministro, la mayor automatización y los cambios laborales; aspectos que desafían a las empresas a aprovechar las tecnologías que permitan visibilizar la cadena end to end y hacer un mejor uso de los activos y recursos humanos para alcanzar un crecimiento rentable. En este punto, cabe definir cuál es el rol que en la actualidad juegan los WMS en la logística.
Consultado respecto a el actual rol que los WMS tienen a nivel operativo y estratégico, Juan Antonio Valdebenito, director comercial de Esnova, sostuvo que, en términos generales, “los WMS permiten visualizar internamente la importancia que tiene cada una de las etapas de la cadena logística desde que se ingresa la mercadería al CD hasta la entrega de ella al cliente final; así como también potenciar los controles internos como el stock, inventario y el control en tiempo real del proceso logístico. Todo esto se traduce en el mejoramiento de la calidad del servicio, basándose en una gestión sencilla y eficaz que además ayuda a reducir costos”.
Ahora bien, en una visión más holística, Juliana Marcuzzi, gerente de innovación y desarrollos tecnológicos de Calyco Latam, manifestó que “el rol principal de un WMS puede analizarse desde distintas aristas. Desde el punto de vista del stock, por ejemplo, sus funciones principales son las de brindar visibilidad a la cadena, sobre el estado de los productos, la cantidad de estos, la disponibilidad y las características propias y específicas de cada una de las mercancías”.
En tanto, desde la arista de los servicios, un WMS permite, según la ejecutiva de Calyco Latam, consultar y dejar registro sobre qué servicios se brindan o se han realizado sobre los productos, qué acciones extras fueran requeridas por cada operación, y poder llevar una clasificación sobre las mismas, de forma tal de poder cuantificar económicamente los movimientos ejercidos.
Finalmente, desde la óptica de la productividad, “el WMS permite conocer cuánto esfuerzo conlleva una determinada operación logística, en tiempos, movimientos de máquinas, horas hombre, etc. En síntesis, nos permite hacer eficiente y eficaz a la operación”, recalcó Marcuzzi.
De acuerdo con las características que los expertos han destacado en torno a los WMS y sus alcances, cabe abordar la temática de la implementación y posibles barreras que ésta podría enfrentar. Al respecto, Sebastián Flores indicó que, si bien existe un amplio interés por implementar esta tecnología, “existen barreras muy específicas que impiden que los clientes puedan avanzar en este tipo de decisiones de forma inmediata, como por ejemplo, tener atributos de iluminación en el sector a implementar, atributos de hardware, puntos de red, entre otros”.
Básicamente, de acuerdo con lo expuesto por Flores, si bien el proceso de implementación de un software WMS es estándar, para iniciar este proceso existen pre-requisitos que – de no existir – impedirían su puesta en marcha. “Las empresas que ofrecen soluciones de implementación de WMS, comúnmente no ofrecen soluciones de iluminación, dispositivos, impresoras e incluso levantamientos logísticos. Esto es sumamente importante, ya que, al ver todos estos pre-requisitos, la mayoría de las empresas prefieren empezar con una consultoría logística antes de iniciar con una solución, ya que tienen temor a que el cambio que genere dentro de la operación sea muy drástico o no puedan soportarlo. Si bien la metodología de las empresas para implementar este tipo de desarrollo logístico es bien clara, los pre-requisitos son muy complejos”, indicó Flores.
UN MERCADO EN CONSTANTE DESARROLLO
Siempre en torno a los WMS, otro de los aspectos a tener en cuenta es el nivel de desarrollo de este mercado a nivel global y nacional. A este respecto, Juliana Marcuzzi explicó que “en virtud de la importancia de estos sistemas, cada día se desarrollan mejoras concernientes a dar a los usuarios mayores herramientas para realizar una gestión eficiente y permitir a otros softwares la interconexión con los mismos, de forma tal de que, la permeabilidad de los datos desde un WMS hacia otros sistemas en la organización permite obtener buenas fuentes de información para la toma de decisiones”.
Sobre este punto la ejecutiva de Calyco sostuvo que existen muchas empresas dedicadas sólo al desarrollo específico de este tipo de herramientas, debido a que el éxito de éstas se basan en poder combinar desarrollo de sistemas inteligentes con vasta experiencia en el campo de las operaciones logísticas.
Considerando lo expuesto, Juan Antonio Valdebenito agregó que “la industria de software es una de las que tiene mayor desarrollo y evolución a nivel mundial y específicamente la industria de WMS ha tenido un importante desarrollo y evolución en la última década, considerando que estas soluciones nacieron como sistemas muy básicos que servían para indicar la ubicación de los productos al interior de la bodega, pero que poco a poco han ido implementando nuevas tecnologías como RFID o han ido incorporando nuevos dispositivos tecnológicos como son los drones o los robots AGV”.
En tanto, la permeabilidad, es decir, la posibilidad de poder dialogar con otros sistemas de forma natural y automatizada, realizar interacciones con múltiples sistemas de la misma organización u otras herramientas softwares que los actores de la cadena logística tengan, es otro factor determinante para optar por las soluciones WMS. En esta línea, la ejecutiva de Calyco, indicó que, “por ejemplo, poder sincronizar información con ERP propio, con portales de e-Commerce, con mensajería y reportería a los clientes finales, con datos para tableros de toma de decisiones dentro de la propia organización o visualización en línea de información para clientes. También deben considerarse cuestiones técnicas como el fácil uso o uso intuitivo para los usuarios. La capacidad para adaptarse a mejoras o innovaciones tecnológicas”.
¿QUÉ DIFERENCIA PUEDE MARCAR UN BUEN WMS?
Finalmente, en lo referido a aquellas mejoras que un buen WMS puede acarrear a la operativa intralogística, Valdebenito sostuvo que “un buen WMS es aquel de características versátiles que permite que se adapte a la necesidad y realidad de sus clientes y no que el cliente se adapte a él”. Así un WMS eficiente se caracteriza por ser capaz de integrarse a los principales ERP´S existentes en el mercado o integrarse a cualquier dispositivo a hardware que utilice el cliente. Además, debe ser capaz de entregar confianza en la administración de los datos y generar una documentación personalizada, así como también debe tener la capacidad de incorporar la gestión de varias bodegas al mismo tiempo para lograr una visión total y general de la cadena logística. Todos estos elementos son fundamentales para entregar un servicio óptimo y de calidad.
Por su parte, Sebastián Flores enfatizó que normalmente se tiende a pensar que la diferencia entre un WMS eficiente y uno deficiente radica en el nivel de productividad que pueda asegurar durante las tareas intralogísticas. No obstante, indica que para que este factor sea determinante es importante que las compañías tengan claro qué procesos quieren optimizar.
En esta línea, Flores sostuvo que “hay factores muy importantes. Cuando se implementa este tipo de tecnologías normalmente es por dos razones: porque la empresa está teniendo mucha pérdida o porque tiene una proyección de crecimiento de 5 a 10 años y para poder aumentar sus ventas requiere de este tipo de tecnologías. Es una decisión de expansión”.
De acuerdo con lo descrito por el ejecutivo de STG Chile, para medir hacia dónde quieren crecer o cómo justificar esta implementación, por lo general las empresas utilizan tres grandes factores. “El primero de ellos es el Retorno de Inversión Tangible, es decir, hay empresas que determinan que el éxito del proyecto se va a clasificar o medir con el incremento de productividad o inventarios en línea, cantidad de procesos, desplazamientos, etc. Aquí hay un KPI medible; también está el Retorno de la Inversión Intangible que hace que las distintas áreas de operación como almacenamiento o recolección, tengan que trabajar en conjunto y unificar la operación bajo una misma herramienta, es decir, incentivar el trabajo colaborativo; y finalmente, también está el Retorno de Inversión Adicional o de valor agregado que significa que una empresa al tener este tipo de tecnologías pueden optar a nuevos canales de distribución y clientes al licitar operaciones nuevas, ayudándolos a realizar operaciones más grandes”.
Con todo, es importante considerar que las principales ventajas que derivan de la implementación de un WMS en las operaciones intralogísticas son la cohesión de equipo, unificación de procedimientos bajo un mismo software/plataforma, incorporación de todas las áreas de operación y la mejora del concepto de operación para optar a nuevas líneas de negocio; todos factores que, sin duda, hacen de este tipo de herramientas un factor decisivo a la hora de lograr los objetivos estratégicos operativos.