En una logística tremendamente desafiada, donde los cambios y los ajustes repentinos están a la orden del día, las ventajas que pueden dar la tecnología y herramientas en torno a la visibilidad de la cadena de extremo a extremo son fundamentales para el éxito operacional. Los ejecutivos coinciden en las oportunidades de respuestas que genera la visibilidad de la cadena.
Las demandas de los consumidores se han transformado en el principal eje de impulso y cambios en la cadena de suministro. Agilizar los procesos, mejorar los tiempos, aumentar la capacidad de entrega, tener certeza de la disponibilidad de los productos, entre otras, son las preocupaciones de la industria.
Lo anterior hace evidente que la visibilidad de la cadena de suministro es más importante que nunca, independiente del tipo de producto que se mueva, desde alimentos y bebidas hasta muebles y materiales de construcción.
En esta búsqueda de visibilidad, la tecnología es un tremendo aliado para dar respuestas a esta necesidad de la cadena. Sin embargo, escoger la tecnología adecuada, que permita conocer en tiempo y forma cada operación y que se adecue a las cualidades de cada eslabón, no es tarea fácil, al igual que el reto que genera el manejo de los datos obtenidos.
Es aquí y ahora donde la digitalización de los procesos cobra fuerza y se transforma en un elemento primordial para fomentar y alcanzar el correcto análisis y manejo de la información; todo con la clara finalidad de ayudar en mejorar la operación, optimizar su diseño, su ejecución, su estrategia y también su futuro.
Saber y conocer el estado real de la cadena de suministro, a través de información veraz y oportunidad, permite la toma de decisiones adecuada en tiempo y forma, siendo parte clave de la ya reconocida resiliencia en la logística. ¿Cómo lograr esto? es la pregunta que se realizan los ejecutivos y cuya respuesta está estrechamente ligada al nivel de madurez de la compañía en términos de supply chain, el nivel de digitalización de sus procesos y sobre todo la mirada de futuro que tenga sobre su operación.
Claro está que contar con una operación moderna y robusta para enfrentar los nuevos desafíos hoy es esencial para responder al nivel de servicio que los consumidores esperan. En esta oportunidad, dos ejecutivos nos hablan del valor que tiene la visibilidad de la operación, la obtención de datos y el correcto análisis de la información para una logística eficiente, óptima, y flexible; ya que lograr una mirada completa, de extremo a extremo, es el primer paso para mantener un control de la operación.
RESILIENCIA Y TECNOLOGÍA: ESTRECHA RELACIÓN
Entender la importancia de la visibilidad de la cadena de suministro en los tiempos que corren es el primer paso para que las empresas comiencen a sumar acciones y herramientas que vayan en esta línea y sean claves para la respuesta que las cadenas pueden dar a las necesidades operacionales actuales.
Para Rubén Belluomo, gerente comercial de Infor Cono Sur, la visibilidad es clave para lograr cadenas de suministros resilientes en épocas normales y, por sobre todo, en momentos de crisis como ha sido la pandemia.
En tanto, Rodrigo Córdova, senior solution advisor de Blue Yonder, el valor de la visibilidad es muy alto, porque “sin visibilidad, las cadenas de suministro no pueden dar el salto de reactiva a proactiva”.
“Tradicionalmente la cadena de suministro planifica en base a eventos repetitivos o conocidos en el mediano y largo plazo, sólo reacciona ante eventos nuevos/sorpresivos. Con una visibilidad aumentada o, mejor dicho, potenciada por la abundancia de data en los sistemas, la toma de decisiones cada vez es más proactiva y aunque nunca se eliminará totalmente la componente reactiva, se abordará con mucha más información por lo que la toma de decisiones es de mucha mejor calidad”, señala Córdova.
Y así, esta anhelada visibilidad de la cadena está tremendamente asociada a la tecnología y al nivel de digitalización y automatización que tenga la compañía en cuestión. Sin embargo, la industria enfrenta un momento de cambios único, donde las empresas han sabido identificar y valorar el aporte de estas herramientas y mirar este camino de cara al futuro.
En este sentido, el ejecutivo de Infor recuerda que la empresa analista y de investigación IDC entrevistó a 80 CEOs en enero y febrero 2020 sobre sus prioridades claves y el estudio arrojó que más del 50% de las organizaciones piensan mejorar sus cadenas de suministro para optimizar la eficiencia de la gestión del inventario y del almacén dentro de los próximos tres años.
“El performance de la cadena de suministro es también una de las principales cuatro prioridades. Para finales del 2021, 35% de las empresas grandes de manufactura habrán automatizado el análisis de datos de sus proveedores y de los gastos, logrando una mejor productividad del 15%, según IDC. Para el 2023, el 50% de las actividades de almacén usarán robots y análisis de datos sobre la ubicación que permitirán la optimización de los depósitos, aumentando la capacidad en un 20% y bajando el tiempo del procesamiento de órdenes a la mitad, conforme a los estudios del análisis”, comenta Belluomo.
Y es así como –a juicio de Rubén- queda en evidencia cómo “la visibilidad resulta clave para una automatización exitosa y lograr mayor resiliencia”. “La cadena de suministro del futuro debe involucrar visualización avanzada de los envíos, órdenes y demás ítems. Contará con una trazabilidad en tiempo real como también acceso a alertas de excepciones y gestión de imprevistos, logrando mejores fechas predictivas de entrega y recepción. Y logrará el objetivo final que es responder la pregunta clave: ¿Dónde están los productos y cuándo llegarán?”, asegura.
Asimismo, el ejecutivo, detalla algunos aspectos básicos en una cadena que busca visibilidad, los cuales están tremendamente vinculados a la tecnología. “Entre las prioridades que se deben considerar en una cadena para tener visibilidad podemos mencionar: Modernización de las funcionalidades de trabajo remoto; Monitoreo y diagnóstico remoto de las operaciones y los activos; Fuerte inversión en la automatización de procesos; Servicio remoto del producto como parte clave de la innovación del producto; Una cadena de suministro más resiliente”, asegura Belluomo.
FLUJO DE DATOS
No se puede mejorar lo que no se conoce y no se puede conocer lo que no se mide. Esta frase que es aplicada en distintos aspectos de la vida operacional y empresarial tiene importancia cuando la logística vive complejos momentos en los cuales la optimización, la eficiencia, la agilidad, la rapidez y sobre todo la continuidad operacional son vitales y son también elementos que se reconocen como parte de una logística moderna, de esa denominada, nueva logística.
Y tal como se analizó el alcance de la visibilidad, es necesario también entender que esa visibilidad, la integración de herramientas tecnológicas y la redefinición de algunos procesos han generado un importante flujo de información. No hay un momento en la historia de la logística en la cual haya más datos de la operación.
“La visibilidad de la cadena de suministro permite que la toma de decisiones sea mucho más eficiente e informada. Antiguamente, se decía que un gerente regular tomaba decisiones con información; uno bueno, con poca información y uno excelente, sin nada de información. Lo anterior es una humorada que hace referencia a la suma de factores ‘suerte’ y ‘experiencia’. Pero en los tiempos actuales, donde la suerte y la experiencia no son fáciles de encontrar y donde la flexibilidad es muy necesaria, con márgenes cada vez más ajustados que no dan espacio a errores, se necesita la información que dé visibilidad de toda la cadena, para potenciar la toma de decisiones y minimizar los riesgos. Por lo tanto, ya no podemos depender de la suerte, necesitamos ver todo lo que pasa y minimizar los riesgos de manera informada”, argumenta el ejecutivo de Blue Yonder.
Eso que puede ser a simple vista un importante flujo de información que aporte conocimiento y mejoras, se vuelve, en ocasiones, un dolor de cabeza para las empresas por errar en el manejo de ellos, generando ineficiencias al no sacar provecho a esos datos que no son más que el reflejo de la operación. En ellos (datos) está el paso a paso de la operación logística, sus dolores, sus fortalezas, sus amenazas, sus desafíos y retos y sobre todo los espacios para seguir creciendo y fortaleciendo la operación.
“En un mundo impulsado por datos, superar los retos de las cadenas de suministro requiere gran agilidad. Hacen falta herramientas que brindan conectividad y visibilidad en tiempo real, planeamiento de la demanda y del suministro y programación de la producción. Afortunadamente la tecnología puede transformar digitalmente la cadena, encontrando nuevas oportunidades para innovar en toda la red. La automatización y analytics avanzadas de un entorno digital pueden, por ejemplo, sincronizar las actividades de producción y distribución para una mejor demanda”, Rubén.
Según Belluomo tradicionalmente, la gestión de grupos de datos complejos, aunque garantiza calidad era manual, lo que “requería contar con las personas adecuadas con los conocimientos necesarios para analizar los datos y crear visibilidad para lograr una toma de decisiones proactiva. Las herramientas modernas de business intelligence (BI) y análisis de datos son ahora mucho más amigables con el usuario, permitiendo que el usuario pueda acceder a los datos que necesita cuando los necesita para la toma de decisiones”.
Sin embargo, la gestión de datos eficiente empieza en el origen, que debe garantizar una fuente de datos confiable, que permite filtrar datos no válidos para facilitar buenos resultados.
Por su parte, Rodrigo Córdova el manejo de los datos es un punto “critico”. En este sentido y ante la marea de datos, lo importante a su juicio es “definir qué uso, con qué frecuencia se necesita cada dato y en qué frecuencia se encuentra. También se requiere definir cuál es la fuente u origen más confiable y determinar además para qué se requiere el dato: es de vital importancia que el negocio tenga claro qué quiere y cómo lo quiere para que desde el requerimiento funcional se construya el flujo de datos que sustente el requerimiento”.
MIRADA DE FUTURO
En torno a esta mirada de futuro de la cadena logística, la industria ha evolucionado y la tecnología ya no es un lujo sino una necesidad para lograr parámetros de visibilidad y eficiencias necesarios para ser competitivos.
En este sentido, el ejecutivo de Infor asegura que “las soluciones para la gestión de la cadena de suministro ofrecen una organización inteligente y en tiempo real de la cadena de suministro, conectando a las empresas con sus socios y transformando digitalmente los procesos desde la planificación hasta la entrega, tanto dentro como fuera de la empresa. Al conectar los sistemas, socios comerciales y dispositivos, al tiempo que se digitalizan los procesos de la cadena de suministro de un extremo al otro, las empresas obtienen visibilidad en tiempo real y potencian las decisiones basadas en datos que les permiten prestar servicios óptimos y a tiempo a sus clientes. Se combinan esos datos enriquecidos con perspectivas predictivas y prescriptivas de IA para proporcionar una cadena de suministro impulsada por la inteligencia”.
En cuanto a visibilidad y tecnología, Rodrigo Córdova asegura que la industria “ha tratado de avanzar en este sentido, hasta ahora existía el problema de dónde concertar la data, hablamos de arquitecturas on premise, donde se requería concentrar y centralizar toda la información para poder mostrarla de forma más o menos útil. Hoy en día, con el avance del SaaS, las tareas de concentrar la data ya no son tan vitales como antes, pero el desafío está en la multiplicidad de formatos que es una batalla en la que se avanza día a día”.
En torno al futuro, Rubén asegura que “la digitalización de las cadenas ya no es opcional. Una cadena de suministro digital debe usar tecnología moderna y estar impulsada por datos, aprovechando los análisis predictivos y prescriptivos para la toma de decisiones. Las organizaciones deben comenzar su estrategia digital con herramientas que pueden resolver las necesidades cambiantes de la cadena de suministro en mercados competitivos, integrando los datos, procesos, sistemas y brindando visibilidad en todos los procesos y operaciones de punta a punta”.
“Creo que la evolución natural de la cadena de suministro es volverse digital y autónoma, incorporando IA profunda que no solo proactivamente genere alertas de posibles interrupciones en la cadena, sino que proponga soluciones optimizadas para la interrupción y finalmente tome de forma autónoma la mejor decisión posible, informando al usuario de la acción tomada” sostiene Belluomo. Las cadenas ya están digitalizadas, lo que falta en este momento es la adopción de IA que tome esa abundancia de data y la transformen en información, visualización, toma de decisiones y automatización, llevando a la cadena de suministro al siguiente nivel.
La estrecha relación entre visibilidad y nivel de servicio es lo que le da valor a la transparencia de la cadena. Contar con visibilidad en todas las fases tiene beneficios, que van en directa relación con el nivel de servicio, menores costos de inventario, mayor seguridad en la planificación y mejor utilización de los recursos.
A pesar de lo evidenciado y lo aprendido en estos dos últimos años, muchas empresas aún no son capaces de tener claridad de la situación de su cadena de suministro y distribución. La visibilidad va en la línea correcta para la mejora de los resultados operacionales. Mayor visibilidad, mayor transparencia. Mayor transparencia, mayor control. Mayor control, mejor servicio.