Según la Cámara de Comercio de Santiago las ventas a través del comercio electrónico podrían sobrepasar los US$6500 millones en 2019. Auspicioso se ve el panorama para el canal online chileno, cuya proyección de crecimiento para el año en curso, según la entidad alcanzaría el 30% anual. A partir de este crecimiento proyectado, el arriendo de bodegas es una alternativa más eficiente en términos de costos y flexibilidad para las empresas que implementan el canal Online.
El sostenido crecimiento que ha experimentado el sector e-Commerce en Chile se explica, entre otros factores, por el cambio de paradigma en materia de consumo con la consolidación de consumidores digitales más empoderados y altamente ‘tecnologizados’; en el buen desempeño general de los canales online desarrollados por los retailers que operan en el país y el desarrollo e impulso de un mercado de PyMes exportadoras/importadoras con presencia en diversos rubros del comercio.
El aumento en las cifras de movimiento de este canal, sumado a las complejidades de los flujos del comercio electrónico y al aumento de los actores ha transformado en un reto para la industria logística, cuya tarea hoy en día es ofrecer alternativas atractivas que permitan a las compañías crecer, desarrollarse, posicionarse y responder con un servicio de calidad a los exigentes y vertiginosos consumidores digitales/on line.
En esta línea, el mercado de arriendo de superficies para almacenamiento en condominios de bodegas ha experimentado en Chile una importante evolución, poniendo a disposición nuevos formatos de bodegas y una atractiva gama de servicios complementarios, pensados para contribuir al éxito del negocio; siempre a un costo muy competitivo y con una flexibilidad que les permite adaptarse a las variaciones en el volumen de operación, que implica el canal on line.
La flexibilidad que entregan las grandes empresas de almacenamiento ha fortalecido el arriendo frente a la construcción de Centros de Distribución propios o bajo la modalidad Built to suit, entre los e-Commerce que operan en el país.
En tanto, el buen momento que se pronosticaba para el mercado de centros de bodegaje para este año ya es un hecho, con claros signos de reactivación en el mercado de bodegaje nacional que se evidenciaron a contar del año pasado. Lo expuesto se sustenta en lo descrito en el Reporte de Mercado de Bodegas realizado por el Área de Estudios de Colliers International que expresa que la vacancia de los centros de bodegaje disminuyó considerablemente durante el segundo semestre de 2018, pasando de 6,4% a 4,5%, lo que equivale a una superficie disponible de 171.800 m2.
Así, a finales del año anterior se vio una alta demanda de empresas buscando alternativas para el escenario de mayor dinamismo que se avecina. En tanto, la mirada de los desarrolladores de Centros Logísticos está enfocada en sus proyectos futuros, según manifestó a Revista Logistec, Diego Castillo Labbé, Gerente del Área Industrial de Colliers International. El experto añadió que, “considerando el actual crecimiento de la economía y sus proyecciones, las empresas ya han experimentado importantes síntomas de reactivación que seguirán en aumento y beneficiarán el desarrollo de este mercado”.
Dentro de este nuevo impulso para la industria, el comercio electrónico asoma como uno de los ítems de mayor crecimiento, lo que obliga al sector logístico a diseñar y ofrecer soluciones a la medida de las necesidades de este consolidado canal de venta. En esta línea, los actores del mercado de arriendo de Bodegas ofrecen una variada oferta para la operativa del comercio electrónico; brindando un servicio de excelencia a través de procesos y espacios logísticos más eficientes, donde factores diferenciadores como la flexibilidad, que les permita a las empresas ampliar o reducir las superficies en arriendo de acuerdo a sus requerimientos; la entrega de servicios complementarios que faciliten y apoyen la actividad logística de su e-Commerce al interior de los condominios de bodegas; la implementación de tecnologías y sistemas de seguridad perimetral de alto estándar en los centros logísticos que permitan una operación segura y fluida; y un servicio al cliente cercano y oportuno para atender en tiempo y forma sus requerimientos inmediatos y futuros, marcan la diferencia en una industria sumamente competitiva.