El desarrollo de habilidades digitales es indispensable para los nuevos profesionales TI, no solo para ejecutar mejoras en la productividad de los servicios, sino también, para lograr eficiencia en la gestión de equipos de trabajos y asegurar fluidez en la comunicación con los distintos equipos técnicos dentro de la organización.
Sin descuidar los conocimientos y habilidades técnicas, hoy en día las habilidades transversales, tales como, la inteligencia emocional, la comunicación efectiva, la capacidad aprendizaje, el espíritu colaborativo, la adaptación y la resiliencia adquieren un valor relevante para hacer frente a situación de crisis como la pandemia.
En el entorno TI la velocidad del cambio tecnológico es abrumadora y cuando ya se logró alcanzar un nivel de experto en relación a algún producto o tecnología, ésta ya sufrió una adaptación o definitivamente quedó obsoleta, por tanto, la capacidad de aprendizaje es una habilidad altamente valorada hoy en día ya que es un “Win-Win”, tanto para el colaborador como para la empresa.
Por un lado, permite el desarrollo y crecimiento personal del colaborador; y por otro, asegura a la empresa retener a personal técnico que se ha convertido en un experto del negocio, ya sea, propio o de sus clientes, logrando una mejora en la calidad constante para la prestación del servicio a través del aprendizaje.
A nivel personal, el espíritu colaborativo y capacidad para adaptarse a las nuevas condiciones laborales son esenciales para el trabajo en equipo, de modo de lograr la sinergia necesaria en post de los objetivos del grupo de trabajo. “Habilidades como la resiliencia, toman cada día mayor fuerza en entornos cambiantes donde la capacidad de enfrentar la adversidad es un factor crítico para la sobrevivencia de los profesionales como de las organizaciones”, plantea Patricio Ibáñez. Gerente de Outsourcing de aplicaciones de Adexus.
Por otro lado, la comunicación efectiva sumada a la inteligencia emocional, esta última altamente valorada en tiempos de incertidumbre, juegan un rol fundamental en la conexión entre los miembros del equipo de trabajo. La habilidad de influir emocionalmente en los demás y saber expresarse en forma clara y sencilla, son esenciales cuando no se tiene la capacidad de controlar presencialmente a los equipos y se debe confiar en el autocontrol y la autorresponsabilidad en la ejecución de tareas.
Evidentemente existen otras habilidades transversales que pudieran no estar mencionadas aquí- como creatividad e innovación, gestión 3.0, por mencionar algunas-, pero sin duda lo importante es que las habilidades blandas pasaron a tener un rol esencial en tiempos de crisis.