Con un crecimiento exponencial y un enfoque centrado en el cliente, EGAKAT redefine la logística con innovación, talento y excelencia operativa. Bajo el liderazgo de Jaime Márquez, la compañía apuesta por la mejora continua, la tecnología y una cultura organizacional sólida para ofrecer un servicio de clase mundial.
La logística es el motor silencioso de la economía global y en ese contexto, EGAKAT se ha consolidado como un operador logístico multinacional con un sello distintivo: el servicio al cliente como eje central de su operación. Más allá de la eficiencia en la gestión de cadenas de suministro, la compañía ha construido su éxito sobre una base de confianza, flexibilidad y atención personalizada, elementos clave para marcar la diferencia en un sector altamente competitivo.
Y este éxito se ha concretado con un crecimiento exponencial, multiplicando su tamaño por 20 en los últimos seis años y consolidando su rol en la industria. Sin embargo, ninguna organización puede alcanzar el éxito sin un liderazgo sólido.
Un buen líder no solo define la estrategia y la dirección de una empresa, sino que también inspira y moviliza equipos hacia un propósito común. En Chile, este rol ha sido asumido por Jaime Márquez, Chief Growth Officer de EGAKAT, cuya visión innovadora ha sido fundamental para el posicionamiento y crecimiento de la empresa en el país.
Bajo su dirección, la compañía ha evolucionado hacia un modelo donde la tecnología, la adaptación a las necesidades del cliente y la construcción de equipos altamente comprometidos son pilares esenciales. Con 25 años de experiencia en diversas industrias y un profundo conocimiento en mejora continua, automatización y tecnología aplicada a la logística, el ejecutivo recalca que: "no basta con conocer la operación, hay que entender cómo cada pieza del engranaje impacta en la cadena de suministro y en la experiencia final del cliente".
PILARES DEL ÉXITO: TALENTO, SERVICIO Y MEJORA CONTINUA
La filosofía de la compañía, según Márquez, se basa en tres pilares fundamentales que han definido su éxito y proyección en la industria:
Talento humano: "Buscamos ser pocos, pero muy buenos, con un gran corazón y orientados al servicio al cliente", agrega. EGAKAT entiende que su mayor activo no es solo su infraestructura o tecnología, sino las personas que hacen posible la operación diaria. Para ello, la empresa invierte constantemente en la formación y desarrollo de su equipo, promoviendo un ambiente de trabajo colaborativo, desafiante y con oportunidades de crecimiento. El objetivo es atraer y retener talento excepcional, creando una cultura organizacional donde la pasión por el servicio y la excelencia sean el motor principal.
Servicio de excelencia: La cultura de EGAKAT coloca al cliente y al cliente de su cliente en el centro de la operación. "Queremos que la experiencia de compra sea la mejor, asegurando que los productos lleguen en perfectas condiciones y a tiempo", afirma el ejecutivo. Para lograrlo, la compañía ha desarrollado procesos de control de calidad rigurosos, monitoreo en tiempo real y una filosofía de servicio proactivo. Además, la empresa fomenta la cercanía con sus clientes, comprendiendo sus desafíos específicos y adaptando soluciones que optimicen sus operaciones.
Excelencia operacional y mejora continua: EGAKAT adopta un enfoque estructurado hacia la eficiencia y la optimización, basándose en metodologías de clase mundial como Lean. La empresa impulsa lo que denominan "la revolución del 1 %", un concepto que enfatiza que cada pequeña mejora en un proceso puede generar un impacto significativo en la eficiencia y calidad del servicio. La empresa busca constantemente formas de elevar sus estándares y diferenciarse en un mercado cada vez más exigente.
La clave para plasmar una estrategia en la gestión del día a día está en liderar con propósito. Para Jaime Márquez, esto implica tener claridad sobre su propio propósito y trabajar constantemente en todas sus facetas: como persona, como jefe y como compañero. Sin embargo, no se trata solo de una visión personal, sino de construirlo en conjunto con el equipo.
“Yo no les entregué un propósito, yo lo que hice fue construir un propósito con ellos”, explica el Chief Growth Officer. El objetivo es que cada miembro lo interiorice y lo haga parte de su trabajo diario, logrando una conexión entre el propósito individual, el del equipo y el de los clientes. “Tiene que haber un punto de conexión entre el propósito de ellos y el propósito de lo que nosotros estamos haciendo, y más aún, interpretar de la mejor manera el propósito de nuestros clientes”, agrega.
En su gestión, la cultura organizacional es el eje de todas las decisiones. “Siempre en la conversación está primero la cultura: cómo está nuestro liderazgo, cómo están los equipos, cómo está la ejecución del propósito y qué podemos hacer para que los equipos puedan entregarlo mejor”, enfatiza Márquez. En este modelo, la estructura tradicional se invierte: primero está el cliente, luego el cliente de nuestro cliente y, después, los equipos internos.
“Le damos a los equipos las mejores herramientas para que ellos, a su vez, le puedan entregar a los clientes lo mejor”, destaca. Desde su visión, el rol del líder es claro: “Yo estoy al servicio de mi equipo para que mi equipo pueda entregar lo mejor”.
Esta forma de liderar ha permitido que EGAKAT no solo crezca en volumen de negocio, sino también en compromiso y cultura organizacional.
INNOVACIÓN Y TECNOLOGÍA PARA EL FUTURO
Para sostener su crecimiento, EGAKAT ha integrado tecnología de punta en su operación. "Nuestro centro de distribución de alimentos cuenta con certificaciones de calidad e inocuidad alimentaria de nivel mundial, como la FSC 22000". Además, la compañía ha implementado una metodología de gestión del cambio, permitiendo una adaptabilidad ágil y eficiente ante las necesidades del mercado.
"El cambio no es una amenaza, es una oportunidad para diferenciarnos y crecer", enfatiza Jaime. En un entorno dinámico, la compañía ha demostrado que la flexibilidad y la innovación son esenciales para mantenerse a la vanguardia.
Los clientes encuentran en EGAKAT no solo un operador logístico, sino un aliado estratégico que se involucra profundamente en sus desafíos. "Nos gusta ir más allá, ser curiosos, innovadores y hasta un poco entrometidos", comenta Jaime. Esta mentalidad les ha permitido desarrollar soluciones a medida y generar relaciones de largo plazo basadas en confianza y resultados.