Para que un organismo complejo se mantenga sano y vivo, es necesario que la sangre llegue a cada uno de los órganos, tejidos y zonas del cuerpo, para entregarles el oxígeno retirando el dióxido de carbono permitiendo la mantención de un ciclo vital de oxigenación y energía.
El suelo para usos industriales tiende a agotarse en el Gran Santiago. Tal afirmación debe preocuparnos, si atendemos a la dificultad que exige la producción de nuevo suelo apto para Logística, Bodegaje y Distribución (LByD). Sin perjuicio de las contingencias por las que atraviesa nuestro país, estas son actividades relevantes en el funcionamiento de nuestra economía, crecientemente vinculada con los hábitos de consumo de los habitantes de nuestras ciudades.