Durante muchos años, los cambios y devoluciones han significado para las empresas un problema que incluso podría tener un costo económico muy alto. Hoy, gracias a los avances en materia de logística inversa, los podemos ver y analizar como una oportunidad y como una forma de aumentar las ganancias a través de la fidelización de nuestros clientes. La manera en que se manejan las devoluciones antes y después de la compra puede diferenciar una marca, crear una ventaja competitiva y aumentar la rentabilidad de una compañía.
Allan Watts, filósofo británico, escritor y sacerdote anglicano decía que para lograr la seguridad no hay que enfrentarse a ella, sino incorporarla a uno mismo, tener un “estilo seguro”, una manera de actuar integrada a todo lo que hacemos y no como algo externo o a ratos. No deberíamos “tener un actuar seguro” sino que deberíamos “ser seguros en el actuar”.